Un sentimiento a nivel Genético.
Al cumplirse ayer nueve años de tu aparición en nuestras vidas.
Al cumplirse ayer nueve años de tu aparición en nuestras vidas.
Tener la posibilidad sentir la concepción de tu otro yo pequeño, y tener la certeza del instante preciso de la ocurrencia de eso, es algo que te marca, agradezco al poder más grande del universo por regalarme esa oportunidad única y maravillosa.
Cuando creas con amor y pasión a quien te reemplazará en carne sobre la tierra, cuando puedes sentir tan fuertemente como se forma una nueva que salió de ti, cuando podrías jurar que nueve meses antes de verlo ya sabías cómo era.
Cuando te invade un frenesí de alegría y se te eriza la piel tanto que puedes ver como los pelos en ella se levantan uno detrás de otro, cuando una sonrisa etérea se pinta en tu cara y todos la pueden ver menos tú, cuando ese brillo en los ojos te conceden el don de ver las cosas como nadie las había visto antes.
Entonces agradeces al poder divino de la creación, escogerte a ti para traer al mundo a un ser mucho más grande y trascendente que tú, aún si es solo de pequeño cuerpo que te hace temblar cuando abre sus ojitos, agarra tu dedo índice y deja escapar una hermosa sonrisa, como diciendo; ¡hola Papá!
Eso eres tú mi niño pequeño mi ópera prima, la segunda nota más importante de mi sinfonía de vida, la segunda extensión de mi alma y ser, mi tercer yo, mi esperanza de plantar otra semilla que crece, no a la sombra del primer gran roble, si no junto a él, te amo con todo mi corazón mi Sebastián.
Te amo, por lo que eres, por lo que serás mañana, y más que nada porque con tu abrazo de hoy, hiciste darme cuenta de lo que hice en ti.
¡Feliz Cumpleaños mi querido niño!
Cuando creas con amor y pasión a quien te reemplazará en carne sobre la tierra, cuando puedes sentir tan fuertemente como se forma una nueva que salió de ti, cuando podrías jurar que nueve meses antes de verlo ya sabías cómo era.
Cuando te invade un frenesí de alegría y se te eriza la piel tanto que puedes ver como los pelos en ella se levantan uno detrás de otro, cuando una sonrisa etérea se pinta en tu cara y todos la pueden ver menos tú, cuando ese brillo en los ojos te conceden el don de ver las cosas como nadie las había visto antes.
Entonces agradeces al poder divino de la creación, escogerte a ti para traer al mundo a un ser mucho más grande y trascendente que tú, aún si es solo de pequeño cuerpo que te hace temblar cuando abre sus ojitos, agarra tu dedo índice y deja escapar una hermosa sonrisa, como diciendo; ¡hola Papá!
Eso eres tú mi niño pequeño mi ópera prima, la segunda nota más importante de mi sinfonía de vida, la segunda extensión de mi alma y ser, mi tercer yo, mi esperanza de plantar otra semilla que crece, no a la sombra del primer gran roble, si no junto a él, te amo con todo mi corazón mi Sebastián.
Te amo, por lo que eres, por lo que serás mañana, y más que nada porque con tu abrazo de hoy, hiciste darme cuenta de lo que hice en ti.
¡Feliz Cumpleaños mi querido niño!
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